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Avelino lleva el balón, con Nacho Blanco agachado y Raúl Entrerríos al fondo, en un Deportivo Gijón-Naranco de 1999. / E. C.
La eterna rivalidad
BALONMANO PRIMERA DIVISIÓN MASCULINA

La eterna rivalidad

El partido Medicentro-Base Oviedo rememora <strong>los históricos </strong><strong>choques entre equipos gijoneses y ovetenses</strong> de los ochenta

J. L. CALLEJA

Sábado, 17 de octubre 2009, 05:08

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El partido entre el Medicentro Gijón Jovellanos y el Base Oviedo (19.30 horas, Palacio de Deportes) viene a rememorar los duelos de los equipos de ambas ciudades en categoría nacional desde la década de los 80. Hasta dicha fecha no se produjeron enfrentamientos, porque la aparición del Naranco data de finales de los años 70.

Los encuentros entre equipos gijoneses y ovetenses de balonmano tuvieron lugar en la categoría de plata y en la de bronce, nunca en División de Honor o Asobal. Tras militar el Grupo Covadonga cuatro temporadas consecutivas en la categoría reina desde su ascenso en la temporada 1975-76, los choques entre conjuntos de Oviedo y Gijón se remontan a principios de los 80.

Entran en escena el histórico Sporting, con el ya desaparecido Juan Arribas en el banquillo y jugadores como Nano Jareño, Varas, Rubio, Jorge, Menchaca y Fede, entre otros; el Grupo, con Roncero de entrenador y algunos jugadores como Paraja, Espina, Manolo Díaz, Bautista y Valentín, y el Naranco, con el técnico Peñarrocha y jugadores que logran posteriormente el ascenso a la máxima categoría como Floro, Felipe Braña, Paco, Peñalva y Manolo Castro.

En los noventa, la eterna rivalidad se ciñe al extinto Deportivo Gijón y al Naranco, con encuentros de verdadero espectáculo como el que enfrentó a ambos conjunto en el Pabellón de La Arena, con un triunfo clave para los ovetenses en su último ascenso a la Liga Asobal, con jugadores de la talla del superinternacional Alberto Entrerríos y Manolo López, por parte naranquina, y Carlos, Dani Carretero y Javi Castro, entre otros, por el bando gijonés.

Ruesga y el Grupo

La campaña 2000-2001 es la última del Deportivo Gijón, cuya plaza en División de Honor B pasa al Grupo, por lo que los enfrentamientos serán ya entre los grupistas y los naranquinos, con saldo favorable para los gijoneses que están a punto de dar el salto a la Liga Asobal en dos ocasiones, con el ahora internacional Carlos Ruesga liderando el equipo.

En la actualidad, en la categoría de bronce se ven las caras el nuevo Medicentro, un equipo que por su filosofía recuerda al Deportivo Gijón, Grupo y Base Oviedo, que sustituye al Naranco.

El choque de esta tarde traerá recuerdos de los pulsos Gijón-Oviedo. El Medicentro de Alberto Suárez, que ya se sentó en el banquillo de equipos de las dos ciudades, es favorito al jugar en casa, pero el Base Oviedo cuenta en teoría con una mejor plantilla. Sin embargo, la emoción y la igualdad parece estar servidas.

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