Las aulas asturianas tienen 233 alumnos con trastornos graves de la conducta

«Algo falla en el capítulo de integración en las aulas asturianas». La denuncia fue formulada ayer por el sindicato educativo ANPE a la luz del 'Informe sobre el estado y situación del Sistema Educativo Asturiano 2007/2008', que hoy se presentará en la Sesión del Pleno del Consejo Escolar del Principado.

Según el documento elaborado por la Consejería de Educación y Ciencia, en los centros educativos de la región hay escolarizados 233 alumnos con trastornos graves de conducta: 139 en centros públicos y otros 94 en colegios concertados.

Son sólo un pequeño porcentaje del alumnado con necesidades educativas especiales matriculado en Asturias durante el curso 2007/2008: un total de 2.513 alumnos, de los que la mayor parte (1.857) están escolarizados en la pública, frente a los 656 que estudian en la concertada.

«Algo falla cuando un docente se tiene que enfrentar a un aula con ocho de estos alumnos, como pasó este curso. Algunos, con comportamientos violentos», señaló Gumersindo Rodríguez, portavoz de ANPE, que apuntó que «esos son únicamente los casos diagnosticados».

«El problema es que el informe no dice nada de sus características ni de su tratamiento», puntualizó Rodríguez, que quiere saber «si presentan conductas disruptivas, si se trata de enfermedades mentales diagnosticadas o de casos delictivos», además de «qué medios se facilita al profesorado que los tiene en su aula» y «en qué consiste el nuevo programa de salud mental».

Es sólo un ejemplo de un informe que «llega con un año de retraso» y que «recoge también unos datos desalentadores respecto a la escolarización de alumnos de etnia gitana».

Otras dos cifras impactantes: «En Enseñanza Secundaria sólo hay matriculados 479 de alumnos gitanos», un número que en Bachillerato se reduce a ocho, lo que, según el sindicato, «supone una ruptura académica y social casi insalvable en la transición de estos alumnos a las enseñanzas universitarias».

«El problema se agrava si se tiene en cuenta que hay centros públicos cuyo alumnado total es gitano, sin duda un modelo nada inclusivo ni integrador». Y otro dato más que apoya esta tesis: de los 6.137 alumnos extranjeros escolarizados en Asturias, el 82% está en centros públicos. ANPE quiere saber «con qué criterios se distribuyen y por qué esa desproporción si tanto públicos como concertados están sostenidos con fondos públicos».