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Santiago Carrillo / E.C.
«No es momento de revancha histórica, pero ellos borraron la Segunda República»
santiago carrillo. ex secretario general del partido comunista de españa

«No es momento de revancha histórica, pero ellos borraron la Segunda República»

JOSÉ RAMÓN ENGUITA |

Domingo, 14 de octubre 2007, 11:21

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josé ramón enguita gijón

Después de una larga tramitación parlamentaria, se ha llegado a un acuerdo sobre el texto de la ley de la memoria histórica, del que se han desmarcado, por motivos muy distintos, Esquerra Republicana y el PP. ¿Qué le parece el proyecto que se perfila ya como definitivo?

No conozco el texto completo, pero el hecho de que esté avalado por un acuerdo del PSOE, el PNV y los partidos que componen el grupo mixto significa una garantía de que esa ley, en lo esencial, va a cubrir los objetivos que se proponen todos los que demandan la recuperación de la memoria histórica. Así que creo que es una buena ley y no comprendo la oposición del PP.

Desde esa formación se argumenta que con esa ley se están abriendo heridas que se habían cerrado con la Transición. Precisamente el PCE, que usted dirigía, fue clave en la recuperación de la democracia al renunciar a cualquier revancha. ¿Por qué se buscan ahora esas reivindicaciones que se habían dejado de lado hace treinta años?

A diferencia de lo que sucedió en Europa, donde el fascismo fue arrasado militarmente y colgados y fusilados sus representantes más destacados, en España, hace treinta años, pasamos de la dictadura a la democracia mediante un acuerdo entre la oposición democrática, fundamentalmente la izquierda, y los reformistas del franquismo. Ese acuerdo era indispensable en aquel momento y se hizo bajo la enseña de la reconciliación. Si hubiésemos reclamado entonces la recuperación de la memoria histórica, que significaba una condena profunda del régimen pasado, no habría sido posible el acuerdo entre reformistas y oposición.

¿Y ahora?

Ahora han pasado treinta años desde ese momento y casi setenta años desde que terminó la Guerra Civil. Y es lógico que con esta nueva situación los vencidos, que por la forma en que se produjo la Transición no reclamaron en aquel momento la condena rotunda del pasado, traten de restablecer la verdad histórica. También como forma de educar democráticamente a las nuevas generaciones. Me parece que es conveniente no ya para los vencidos, sino para el sistema democrático. La verdad es que no se plantea la cuestión de juzgar ahora responsabilidades de la dictadura. No se trata de sentar en el banquillo a nadie, los protagonistas de aquella época están muertos y enterrados en su inmensa mayoría. De lo que se trata es de contribuir a la creación de una cultura auténticamente democrática en este país. Por eso pienso que no basta con una ley, hace falta un esfuerzo cultural de maestros, intelectuales, artistas, profesores y políticos.

¿Y eso enlaza con iniciativas como la puesta en marcha de la asignatura de Educación para la Ciudadanía?

Sí. Es un momento no de una revancha histórica que nadie pretende, sino de una auténtica revolución cultural en un país que estuvo cuarenta años bajo una dictadura brutal que subvirtió todos los valores y realizó políticas profundamente perjudiciales. Se trata de poner a España al nivel de los demás países de nuestro entorno europeo, que resolvieron ese problema colgando o fusilando a los fascistas. Aquí no se trata de fusilar a nadie, sino de crear una cultura democrática.

¿Cree que la ley tendría que incluir la revisión de los juicios del franquismo, como reclama ERC?

No se revisan, pero se declara la ilegitimidad de aquellos procesos, que es una forma de revisión de carácter colectivo y es lo que puede hacerse setenta años después. Figúrese si cada uno de los descendientes de las víctimas planteara la revisión de los casos de sus antepasados injustamente condenados. No habría aparato de justicia que resistiese esa avalancha de trabajo. Lo importante es que haya una ley que declare ilegítimo todo aquello.

¿Qué opina de la obligación de retirar estatuas y monumentos del franquismo, cuando las ciudades españolas están llenas de estatuas de personajes relacionados con épocas no democráticas?

Ellos dicen que eso es Historia y que la Historia no se puede borrar, pero ¿quién borró la Historia de la Segunda República? En Madrid no hay ninguna estatua del general Miaja o del general Rojo, que defendieron durante tres años la capital. Todos los emblemas que recordaban la República fueron barridos en este país. ¿Cómo se extrañan ahora de que se quieran borrar los recuerdos de una etapa histórica tan atroz como la dictadura?

La revisión que propugna el proyecto de ley coincide con el cuestionamiento de símbolos nacionales como la bandera o la figura del Rey. ¿Cómo ve esta polémica?

Creo que quemar fotos del Rey o banderas es un disparate y una tontería. Creo, además, que es una minoría la que hoy hace cosas de ese género. Por otra parte, el PP está armando un gran escándalo por que no se obliga a algunos municipios a poner la bandera española, pero cuando gobernaban ellos tampoco se ponían. Y es Montilla el que ha puesto la bandera española en la Generalitat y en el Ayuntamiento de Barcelona. En realidad, este Gobierno ha conseguido que se respeten los símbolos de España mucho más seriamente que cuando gobernaba el PP.

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