Borrar
Jorge Villarrica, con el prototipo de válvula. / J. BILBAO
Una ingeniería gijonesa desarrolla una válvula contra la contaminación marina
EL PROCESO

Una ingeniería gijonesa desarrolla una válvula contra la contaminación marina

Su función es equilibrar presiones para evitar la rotura de los depósitos en caso de hundimiento de buques-tanque

NACHO PRIETO

Lunes, 14 de julio 2008, 04:33

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Una ingeniería gijonesa, Prodintec, acaba de presentar en Bruselas una nueva válvula que tiene la función de evitar las diferencias de presión que provocan roturas en los depósitos de buques tanque en caso de hundimiento, con el correspondiente vertido contaminante. El invento, sobre una idea inicial de un pescador mallorquín, fue desarrollado y experimentado en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón por encargo de la naviera del Grupo Alvargonzález Ership.

El objetivo ahora es poner la nueva válvula en el mercado con las máximas garantías de éxito. A tal fin se pretende, por una parte, implicar en la producción y distribución de la nueva válvula a alguna de las pocas empresas del sector con implantación a escala mundial, y, por otra, captar el interés de las autoridades marítimas internacionales, a fin de propiciar que su utilización llegue a ser obligatoria, igual que lo son otros elementos de seguridad en los barcos.

La participación gijonesa en el proyecto tiene como protagonistas a Jorge Villarrica y Paula Queipo. El primero fue el responsable de desarrollar y experimentar la válvula, mientras que la segunda tiene ahora la misión de introducirla con eficacia en el mercado.

Queda dicho que la idea inicial corresponde a un pescador mallorquín, Ignacio Borrás, quien patentó el sistema para que la válvula no sólo equilibre las presiones en caso de hundimiento, para evitar la rotura de los tanques, sino también, en sentido contrario, si se produce el reflotamiento del buque.

Ni que decir tiene que si el hundimiento de un barco se produce por el abordaje de otro y la colisión rompe algún tanque, no hay válvula posible que impida el correspondiente vertido. Pero hay que tener en cuenta que el naufragio no siempre se produce por vías de agua que afectan a los depósitos, y que varios de los tanques pueden resultar inicialmente indemnes en un accidente. En esos casos, sin válvula que equilibre las presiones, bodegas no dañadas quedan abocadas a quebrarse, con el consiguiente vertido.

Experimentación

Eso es lo que el dispositivo desarrollado por Prodintec puede evitar, según dijo a EL COMERCIO Jorge Villarrica. Para considerar el dispositivo suficientemente comprobado, Prodintec realizó, inicialmente, una «modelización matemática» y, posteriormente, un prototipo. El tanque en el que fue probada la nueva válvula fue también diseñado y construido al efecto.

Como es obvio, se trataba de reproducir en laboratorio las condiciones que pueden darse en la mar y a gran profundidad, de forma que no era suficiente sumergir el prototipo en una piscina cualquiera.

Villarrica explicó que la experimentación se realizó en condiciones diversas, ya que el tanque de un buque nunca puede estar completamente lleno, pero sí admite distintos niveles de carga. La dilatación obliga a mantener siempre una cámara de aire y esa circunstancia tiene que ser tenida en cuenta para el funcionamiento de la válvula. El citado ingeniero gijonés pone como ejemplo que en el viaje de un petrolero desde Alaska a México puede variar la temperatura unos 40 grados, de forma que la dilatación es significativa.

Patente

En otro orden de cosas, cabe indicar que los responsables de Prodintec consideran la nueva válvula suficientemente experimentada desde principios de 2007. El último año y medio estuvo dedicado a tramitaciones administrativas para extender la patente inicial al ámbito internacional, especialmente a países con grandes astilleros.

Sobre el coste de producción de la nueva válvula, Villarrica asegura que no hay razón para que supere el de otras ya existentes con similar función, aunque menos perfeccionadas, de forma que los armadores que decidan instalarla dispondrán de mayores garantías de seguridad sin necesidad de ampliar la inversión a la hora de construir el barco.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios