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'Sanidad pública, tema tabú', por Juan Neira
AL GRANO

'Sanidad pública, tema tabú', por Juan Neira

JUAN NEIRA

Sábado, 15 de agosto 2009, 05:10

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LAS propuestas de Ana Rosa Migoya sobre reducción del gasto sanitario, apelando a un buen uso de los servicios de urgencias por parte de los usuarios y a moderar la petición de pruebas diagnósticas y la prescripción de fármacos por parte de los médicos, han sido mal recibidas por Izquierda Unida, el Colegio Oficial de Médicos y las asociaciones de pacientes. Jesús Iglesias es contrario a la supresión de servicios hospitalarios para evitar su duplicación, no considera oportuno hacer advertencias sobre el gasto a médicos y enfermos, y rechaza la fórmula del copago. Para el coordinador general de IU la solución al creciente gasto sanitario pasa por elevar los impuestos a las rentas más altas. El Colegio de Médicos cree que el Principado apunta hacia la privatización de la sanidad, y las asociaciones de pacientes consideran demagógicas las propuestas de Ana Rosa Migoya.

El debate político asturiano está lleno de asuntos tabú. La gestión de los servicios públicos es uno de ellos, de forma que cualquier intento de reforma levanta el espantajo de la privatización desde todas las posiciones, incluyendo a partidos, como el Partido Popular, que tienen entre sus premisas ideológicas la potenciación de la iniciativa privada tanto en la producción de bienes como en la prestación de los servicios. No resulta fácil de entender que un colegio profesional asocie la restricción de las pruebas diagnósticas con la privatización, y más misterioso aún resulta que la privatización de la sanidad constituya un peligro para los profesionales de la Medicina.

Si desde partidos o asociaciones que tienen en el frontispicio de su ideología la libertad de iniciativa se rechaza el recorte del gasto público sanitario, razón de más para hacerlo desde Izquierda Unida, que recela de cualquier empresa privada y siempre abraza los postulados del sistema público. El problema surge cuando se pasa de cualquier ideología al presupuesto, y el gasto supera los ingresos.

¿Es necesario que el hospital de Mieres tenga todos los servicios, cuando el Hospital Universitario Central de Asturias está a nueve minutos? ¿Es normal que todos los jubilados, con abstracción de su nivel de ingresos, consuman 300 millones de euros en fármacos bajo la fórmula de gratis total, cuando los trabajadores en paro pagan sus medicinas? ¿Se pueden financiar todos los excesos con más impuestos al 3% de contribuyentes que declaran ganar más de 60.000 euros?

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